El Gato Común Europeo: Un felino versátil

El Gato Común Europeo, también llamado gato doméstico de pelo corto o gato casero, es la raza de gato más popular y abundante del mundo. Presentes en hogares europeos desde tiempos inmemoriales, estos adaptables mininos son los ancestros de la mayoría de las razas modernas de gatos.

Orígenes continentales

Se estima que los gatos fueron domesticados en Oriente Medio hace unos 10.000 años. A través de rutas comerciales llegaron a Europa donde se popularizaron rápidamente por su habilidad cazando roedores en granjas y poblados.

Con el paso de los siglos los gatos caseros europeos desarrollaron rasgos distintivos por selección natural y adaptación regional: un tamaño mediano, pelaje corto en múltiples colores y patrones, cuerpo esbelto y cola gruesa en la base.

Aspecto versátil

El pelaje del Común Europeo es corto, suave y cerrado, con una textura casi como terciopelo. Viene en virtualmente todas las combinaciones imaginables de color y patrón. Lo más común es el patrón atigrado, en tonos grises, marrones o negros.

Su complexión es elegante y esbelta. Las orejas son de tamaño mediano, anchas en la base y ligeramente redondeadas en la punta. Los ojos suelen ser verdes, dorados o impar. La cola es de grosor mediano, con la punta redonda.

Temperamento sociable

Los gatos caseros europeos son famosos por su temperamento amigable y su flexibilidad. Son gatos moderadamente activos, tanto diestros cazadores como afectuosos compañeros del hogar.

Se adaptan fácilmente a distintos estilos de vida y situaciones. Son capaces de vivir tanto en grandes propiedades rurales como en apartamentos urbanos. Muchos conviven sin problemas con perros, otros gatos e incluso animales de granja.

Cuidados esenciales

• Al ser tan versátiles, sus necesidades varían, pero en general son gatos de bajo mantenimiento que requieren las atenciones básicas: alimento de calidad, rascadores, arena higiénica y visitas anuales al veterinario.
• Su esperanza de vida media es de 15 a 20 años con adecuados cuidados. Hay que protegerlos de peligros al aire libre como el tráfico y las peleas con otros animales.
• A nivel de salud, pueden padecer de algunos problemas como el VIF, la leucemia felina y problemas periodontales. Una dieta adecuada y controles periódicos permiten una detección temprana.

Herederos de una tradición milenaria al lado de los humanos, los gatos caseros europeos continúan siendo los compañeros ideales para toda clase de personas por su carácter dócil y fácil adaptación. ¡No es coincidencia que más del 80% de los gatos domésticos del mundo pertenezcan a esta popular raza!

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